Las políticas públicas son complejas y necesitan que junto al sagaz político, que aúna su experiencia a su comunicación efectiva y apoyos consolidados, haya técnicos que le señalen los diversos caminos y alternativas, poniendo de manifiesto los aspectos positivos, los negativos, los recursos necesarios emplear y los riesgos en los que hay que aventurarse. Con frecuencia, además, la coherencia de los proyectos con el marco constitucional y la legislación existente.

El politólogo norteamericano Moore estudió el comportamiento y los resultados de funcionarios públicos. Llegó a la conclusión de que ya no era tan importante tener funcionarios responsables de cumplir sus mandatos de la manera más eficaz y eficiente posible, que siempre es necesario, sino que resultaba imprescindible el conocimiento de otras habilidades puesto los funcionarios habrían de ser” responsables de encontrar los usos más valiosos de los recursos que les han sido confiados” (Mark H. Moore, 1998).

Con este fin, durante dos días se ha celebrado en Brasilia una reunión organizada por el Centro Latinoamericano de Administración para el Desarrollo (CLAD), en los que representantes de las Escuelas e Institutos de Administración Pública de veinte países, y representantes de  CAF Banco de Desarrollo de América Latina y el Caribe y Departamento de Asuntos económicos y sociales de las Naciones Unidas (Undesa) ,han debatido sobre las mejores formas de capacitar a los funcionarios y, en definitiva, prepararlos para poder asistir y aconsejar de manera adecuada a los responsables políticos de sus países. Han decidido promocionar el intercambio de experiencias mediante la organización de conferencias internacionales y la creación de plataformas en línea. Estos espacios permitirán compartir exitosas estrategias y enfoques de formación, posibilitando la adaptación de métodos exitosos en contextos similares y fortaleciendo así la base del conocimiento global.

Los responsables de estas escuelas de formación les preocupan muchas materias, pero especialmente aquellas que tienen carácter técnico, así como otras necesarias para la llevanza de los asuntos públicos. Por esta razón, las Escuelas realizan actividades docentes que buscan la formación en materias que les formen o capaciten en capacidad de liderazgo y para dirigir un equipo, fijar objetivos, planificar, gestionar lo imprevisible, ser innovador y disruptivo.

Se trabaja en estos centros sobre la sinergia entre la tecnología y el enfoque humano, la accesibilidad por medio de plataformas virtuales y la promoción de la autogestión. El realce de la calidad de la formación por medio de la integración de recursos multimedia se ve potenciado por la adopción de un enfoque diversificado en aras de la innovación.

La profesionalización y la excelencia en el ámbito público son los cimientos de estas iniciativas. A través de la innovación formativa, se persigue no solo dotar de herramientas técnicas y competencias como las señaladas, sino también cultivar valores éticos y habilidades interpersonales esenciales para un servicio público eficaz y responsable. Para ver con mayor rigor crítico la situación moral de nuestras sociedades, como señaló el pensador mexicano, es necesario insistir en aquello que tiene que ver con la libertad, la justicia, la fraternidad y, en fin, con lo que llamamos comúnmente valores. (Octavio Paz. La llama doble, 1993).

Las alianzas con las instituciones académicas han propiciado en todas las Escuelas funcionariales la oferta de programas de maestría y doctorado que enriquecen la formación de los empleados públicos. Los programas de certificación, diplomados y licenciatura en Administración Pública engloban una gama de modalidades para adaptarse a las necesidades de los funcionarios. La formación se orienta hacia la autogestión y las tutorías para brindar una experiencia de aprendizaje personalizada.

La adaptación a las variantes tecnológicas, el potenciamiento del pensamiento crítico y la creación de contenido de alta calidad, demuestran la flexibilidad y el compromiso con la excelencia educativa. Cada país ha hallado modos únicos de integrar la tecnología y los recursos multimedia para mejorar la formación en la Administración Pública

Entre las decisiones más relevantes del Encuentro han de citarse la creación de una plataforma en línea para compartir recursos educativos y mejores prácticas en la formación de empleados públicos. Igualmente han resuelto crear una red de expertos en formación que facilite el intercambio constante de ideas y conocimientos.

Entre las ideas más originales se encuentra la de implementar un programa de certificación internacional enfocado en habilidades de liderazgo específicas para el sector público. Esta certificación elevará la calidad de los líderes gubernamentales y su capacidad para enfrentar los desafíos actuales

La preocupación de muchos responsables por el envejecimiento del personal de las administraciones y la necesidad, por otra parte, de heredar organizativamente sus experiencias, genera la idea de potenciar los programas de mentoría como un recurso esencial para la transferencia de conocimientos y habilidades. La implementación de programas de mentoría permitirá la conexión entre funcionarios experimentados y nuevos empleados, creando una vía efectiva para la transferencia de conocimientos y el fomento de relaciones significativas que trasciendan generaciones.

Se ha insistido en este IX Encuentro además en promocionar métodos educativos innovadores, como la gamificación y la realidad virtual, integrar las competencias digitales esenciales, como el análisis de datos, la inteligencia artificial y la ciberseguridad, crucial en la era actual. En fin, formar a los funcionarios para generar políticas públicas excelentes y lograr mejorar la confianza ciudadana.

@sgeneralClad

Fuente: https://www.elnacional.com/opinion/funcionarios-capacitados/